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El papel de un ministro extraordinario de la Sagrada Comunión es ayudar al sacerdote a servir la comunión durante la celebración de la Misa. Los ministros de la comunión están programados para servir la comunión en una misa o servicio específico en la iglesia, y lo hacen de manera significativa y eficiente. Reciben capacitación asistiendo a talleres y mediante la guía de los Coordinadores de Misa. La comunión debe distribuirse con reverencia, reconociendo la santidad del cargo de ministro extraordinario.
Formulario de interés ministerial
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Ministro Extraordinario de la Sagrada Comunión
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